
Queridos amigos y amigas del alma,
Desde el fondo de mi corazón, especialmente en estos días, me vienen como a borbotones los muchos recuerdos que tengo con cada uno de vosotros.
Gracias al Camino y a su Aliento de Vida, y junto con nuestras meditaciones, siento que vamos recuperando nuestro mejor estado a pesar de las circunstancias de estos momentos.
Sin dudar y sin poder dudar, a través de mis pensamientos, palabras y acciones os quiero decir lo que siento:
- Prometo no renunciar al entusiasmo, a la alegría, al optimismo y al amor; porque la falta de ellos petrificarían mi cuerpo y mi alma.
- Prometo no renunciar a la Vida del Aliento de Vida o Fuente Original de la Esperanza que me llena de juventud eterna; porque su falta me haría perder la juventud viva y feliz, y sin juventud entraría en la oscuridad del desaliento.
- Prometo no renunciar al optimismo, a la alegría y al amor; porque sin ellos se invadirá mi alma de pesimismo y podría perder para siempre las alas que me transportan de lo limitado a lo ilimitado, pues sin estas alas mis pasos me llevarían al pesimismo desfavorable y negativo.
Vivimos en el mejor de los Momentos y en el mejor de los Lugares.
Vivimos en el mejor mundo posible en donde el dolor, el sufrimiento, el miedo, la enfermedad, la soledad, etc., no son perpetuos y absolutos.
Vivimos en este Lugar de aquí y en este Momento de ahora. A este Lugar y a este Momento, ¿qué le puede faltar?
Este tiempo y este lugar está sostenido momento a momento por el Camino, la Verdad y la Vida.
Un abrazo muy grande, esperando que nos veamos pronto.
Pedro Vidal
Murcia, Molina de Segura a 11 de diciembre de 2020